Desde que Charlene de Mónaco ha recuperado su rutina o lo que queda de ella, han abundado los besos, los recorridos tomados de la mano y las miradas cómplices entre ella y su esposo el Príncipe Alberto. Sin embargo, pareciera todo parte de una gran actuación.
En los últimos días se ha visto a la princesa consorte de Mónaco tomando un descanso en soledad. Si bien es frecuente que los integrantes de las distintas casas reales elijan algunos destinos privados para alejarse de las miradas curiosas, sorprende el modo en el que lo hace el matrimonio monegasco.
La relación entre el Príncipe Alberto y Charlene de Mónaco siembra algunas dudas y sospechas. Esto debido a que si bien es de lo más acostumbrado que los royals desaparezcan de la esfera mediática, esto no significa precisamente que las parejas deban tomar caminos separados, como según lo reportado por OK Diario ha ocurrido entre Alberto y la ex nadadora zimbabuense
Al parecer Charlene de Mónaco y Alberto no se encuentran en el castillo veraniego de Roc Agel como se creía, si no que el esposo y los hijos de Charlene se encuentran navegando en las costas de Córcega, sin rastros de ella.
Estas informaciones han reavivado las alarmas sobre una situación compleja que va más allá de una crisis de pareja eventual y realza la posibilidad de que realmente Charlene de Mónaco esté recibiendo dinero para ocupar protocolarmente el rol de la esposa del Príncipe de Mónaco, pero con un contrato de por medio.