Rafael Nadal ha vivenciado momentos difíciles y decisivos, tanto en lo personal como en lo profesional. Él mismo manifestó que son "semanas difíciles".
El tenista no se encuentra bien anímicamente y por eso abandona el torneo. Se ha sincerado diciendo "no estoy bien, no estoy bien". Nadal ha dejado claro que lo que necesita es alejarse un poco de las canchas hasta que su vida personal se acomode y pueda volver a ponerse a punto. Pero, ha sembrado la duda con su declaración: "Si me voy o no, necesito volver a la habitación y pensarlo bien. Ahí tengo que decidir". Haciendo referencia a qué aún no sabe cuál será su elección luego de que nazca su hijo.
¿Qué le preocupa a Rafael Nadal?
La principal preocupación de Rafael Nadal es el estado de salud de Xisca Perelló, su esposa desde 2019 y con quién espera su primer hijo. Y, así lo hizo saber sacando a la luz sus sentimientos más personales: "Han sido semanas difíciles. Pocas horas de dormir, un poquito de estrés en general, situaciones un poco más complicadas de lo habitual en casa. Con lo cual, he tenido que lidiar un poco con todo eso, que es una presión diferente a lo que estás acostumbrado en la vida profesional". Dijo el tenista.
La mujer del deportista fue ingresada en el mes de agosto a un centro de salud en Mallorca debido a una leve complicación en su embarazo. A Xisca Perelló le pidieron que hiciera reposo. En ese momento el mallorquín se encontraba en Nueva York compitiendo en el US Open, por lo que no pudo acompañar a la señora que no estuvo sola, sino que tuvo la compañía de sus padres y de Maribel Nadal.
Aunque, Rafael Nadal sabe que todo marcha bien en el embarazo y que las cosas están más tranquilas ha decidido estar más presente en su casa en el último tiempo de gestación de su hijo. Además, recientemente, el deportista ha vivido una emoción muy fuerte debido a la despedida de Roger Federer, su colega y amigo.
Nadal deseaba estar en el último partido del "Maestro". Este fue un momento que le entristeció y afectó mucho. Quedó muy golpeado y lloró desconsoladamente al despedir a un gran amigo dentro y fuera de la cancha. Ambos han sabido competir en varios títulos de Grand Slam. Los números favorecen al mallorquín, pero lo más importante es el espectáculo que brindaron a su público y al mundo del tenis. Rafael Nadal pudo hablar sobre lo que sintió en la dura despedida: "Soy una persona bastante sensible. No me preocupa tampoco. Llorar es bueno a veces. Necesitas soltar esas emociones. Se va una parte de mi vida por lo que es difícil".
El futuro de Nadal
Lo fundamental en la vida del tenista es recuperar la estabilidad y tranquilidad.
"Hoy en día lo que me gustaría es poder recuperar un poco la normalidad, durante el siguiente mes que termine todo el tema personal, que todo salga bien y después organizar mi vida".
Lo emocional no es lo único que preocupa e inquieta a Rafael Nadal, también está presente su estado físico. últimamente ha manifestado que todos los días le duele algo nuevo, haciendo referencia a las lecciones. Pero cuando todo su tema personal, físico y emocional se mejore o al menos se acomode pretende "empezar de nuevo".
Alejarse de su profesión ha estado en su cabeza desde que quedó eliminado en octavos de final del US Open con el francés Tiafoe. Desde entonces el mallorquín piensa en tomar distancia de las canchas. "Necesito volver. Tengo cosas mucho más importantes que el tenis que atender" dijo Rafa en ese momento que las cosas en su vida se empezaban a complicar.