Jueves 11 de Enero de  2024 // 18:55 hs
ANA OBREGÓN

Ana Obregón hizo pública la noticia que la termina de derrumbar por completo

Ana Obregón, una vida llena de pérdidas.

Escrito en ENTRETENIMIENTO el

No cabe ninguna duda de que Ana Obregón es una persona fuerte y de lo más valiente dentro del mundo mediático. Después de la angustiante pérdida de su único hijo Aless Lequio, a causa del cáncer, luego de su madre y al tiempo de su padre, la presentadora saca coraje todos los días para continuar. 

La vida le puso los desafíos más difíciles a la actriz que, afortunadamente, cuenta con un gran apoyo para sobrellevar sus días de tanta amargura. De esta manera, Ana Obregón consigue estar predispuesta para salir, viajar, vestir otros colores y retomar sus actividades profesionales como la actuación. Contra viento y marea, ella lucha por sacar una sonrisa.

Ana Obregón, una luchadora de la vida. (Twitter)

Ana Obregón recordó a su mascota, quien ya no se encuentra a su lado y la echa mucho de menos. "Mi Lunita", escribió la intérprete en un posteo que subió en la historia de su cuenta personal de Instagram, además añadió un corazón roto, dejando entrever que se encuentra con cierta tristeza.  

Ana Obregón muestra su tristeza por otra pérdida, su mascota. (Instagram)

Su fiel compañero, Raúl Castillo

La artista, como ya es de costumbre, compartió una story en la que escribió unas palabras muy sentidas dirigidas hacia su amigo de la vida. "Raúl es la prueba de que la Navidad existe, un ángel de la guarda", manifestó Ana Obregón. Lo cierto es que Raúl Castillo es quien más acompaña a Ana, siempre está al tanto de ella y le brinda todo su cariño.

Raúl es la prueba de que la Navidad existe, un ángel de la guarda

Ana Obregón junto a su gran amigo Raúl Castillo. (Instagram)

La relación de Ana y Alessandro Lequio

Ana Obregón abrió su corazón y le confesó a Bertín Osborne que sí dialoga de manera frecuente con su expareja Alessandro Lequio, padre de su hijo. Con el tertuliano, habla con la finalidad de recordar a Aless, traer al presente algunos momentos del pasado y conseguir fuerzas para seguir adelante a pesar de todo.