Pilar Rubio es una mujer multidisciplinaria, puede preparar desde cócteles hasta escribir un libro, dormir poco y al otro día aparecer radiante y fresca. Lo último que hizo fue viajar a Madrid para presentar su tercera colección de bañadores, con la que está muy involucrada.
Desde que se mudó a París con sus cuatro hijos por el contrato de su esposo Sergio Ramos con el Paris Saint-Germain, se puso como meta aprender a hablar francés, y después de un año lo ha conseguido. Rubio entiende perfectamente a los parisinos, quienes no suelen hacer fácil la conversación, pero ella lo ha podido sortear sin problema.
Como todo cambio, la mudanza tuvo sus pros y contras. Cambiar de país no ha sido nada sencillo, con cuatro niños pequeños y cuatro perros a los que trasladar, pero lo ha hecho. Lo bueno es que, al ser tan peques sus niños, les ha sido muy fácil adaptarse a la nueva vida en Francia.
Por suerte, Pilar Rubio cuenta con su madre cada vez que la necesita. La presentadora confiesa que, aunque está cerca de ell -su madre reside en Madrid-, sufre mucho los viajes en avión, aunque no le queda otra que pasarlos y ponerle ánimo.
País nuevo, vida nueva
Este miércoles, Sergio Ramos le dedicó a su esposa unas tiernas palabras en su perfil de Instagram, a la que daba gracias por el esfuerzo que hace día a día.
Pilar se enteró tarde de este mensaje de amor, ya que con el lío de los eventos, los niños y los perros no lo vio a tiempo. Cuando se le consultó por sus situación actual, afirmó que una de las partes de la pareja tiene que sacrificarse cuando hay una vivencia así, de lindo caos.