El año 2022 no será recordado como un buen año para la Infanta Cristina. Finalmente su matrimonio de casi 25 años se iba irremediablemente a pique por más esfuerzos que ella había hecho para que eso no ocurriera.
Es que la publicación de unas fotos de su todavía marido, Iñaki Urdangarin, caminando de la mano por la playa con otra mujer en enero pasado no le dio muchas más opciones que anunciar oficialmente su separación.
Ese matrimonio que había comenzado casi como un cuento, con un flechazo casi instantáneo y una boda principesca un año después se había terminado.
La periodista Paloma Barrientos ha publicado recientemente “Los secretos de la Infanta”, un libro en el que desvela algunos momentos en la vida de la hija del Rey Juan Carlos que no son tan conocidos para el ojo público.
Y, obviamente, el tema de su matrimonio con el exdeportista no podía faltar. Porque aunque parezca que ya se sabe todo de ellos, todavía queda hilo por devanar en ese carretel.
“La Infanta Cristina se enamoró perdidamente de ese hombre, y cuando salieron los turbios asuntos del caso Nóos, Cristina lo siguió apoyando a muerte, lo que le costó romper con su propia familia” ha señalado Paloma Barrientos en una entrevista con Pronto.
Así es que la periodista habla de lo que sufrió la Infanta Cristina esa situación y cómo aunque en público no parecía estar pasándola mal, la realidad era que “nadie imaginaba que ella estaría sentada en un banquillo y su marido, preso. Eso le ha cambiado la percepción de la vida”.
“Es la que hizo una carrera universitaria de verdad"
Y eso que, según Paloma Barrientos, la Infanta Cristina “ha sido la hija más lista e inteligente de los Reyes eméritos. Y la de mayor carácter de la familia”.
“Es la que hizo una carrera universitaria de verdad. Sus padres estaban en contra de los estudios que eligió: Sociología y Políticas”, ha contado Paloma Barrientos. “Es que se trataba de un ambiente universitario conflictivo y en contra de la monarquía”, ha explicado la periodista.