Mariló Montero fue una de las últimas famosas en emprender acciones legales contra La Fábrica de la Tele dentro del marco de la Operación Deluxe, una investigación sobre un presunto espionaje ilegal. Da la casualidad que la televisiva, hasta hace apenas unos días, era una trabajadora más dentro de uno de los programas de la casa, Todo es mentira.
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De hecho, la cadena la encargó a la periodista dar las Campanadas con Risto Mejide, especial que no logró la audiencia esperada y que tan solo cosechó un 4,7% en lo que a público se refiere. Por el momento, Mariló Montero no hizo ninguna declaración al respecto, pero se suma a una larga lista de rostros conocidos que quieren llevarlos a juicio.
Julián Muñoz, Isabel Pantoja, Omar Montes y Coto Matamoros ya denunciaron y, según informan, ya son un total de 35 las personas que figuran hasta ahora como acusación particular, un número muy superior respecto al que se conocía hace unos meses. De hecho, Mayte Zaldívar, primera mujer de Julián Muñoz, también se encuentra en la lista.
Son un total de 35 las personas que figuran hasta ahora como acusación particular
Desde el 2018, la justicia está intentando arrojar luz sobre un presunto delito de revelación de secretos en el que el policía Ángel Jesús Fernández Hita facilitaba información reservada a la dirección de Sálvame y a otros colaboradores del programa como el paparazzi Gustavo González. Kiko Rivera, Ortega Cano, Aída Nizar, Ivonne Reyes y Belén Esteban son otros de los nombres que aparecen en el sumario, junto a la expareja de Carlos Herrera Crusset y que también fueron presuntamente investigados.
Mariló Montero forma parte ahora de este asunto tras haber presentado una acusación particular, de hecho, ahora aparece su nombre en la denuncia por delitos de revelación de secretos por funcionario y cohecho de la diligencia del Juzgado de Instrucción nº4 de Madrid, según El Confidencial Digital. Un proceso que, lejos de terminar, se prorrogará de momento seis meses más en lo que se refiere a la investigación previa.
La Fábrica de la Tele, cuando saltó todo el escándalo, negó los hechos y aseguró que siempre había actuado “en el marco de la ley y dentro de su actividad periodística y en el legítimo ejercicio de derecho a la información”.