Luego de la inesperada y rápida separación de Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, la pareja tomó rumbos muy distintos y a medida que fue pasando el tiempo, el escritor y la reina del papel couché se fueron enfrentando cada vez más, con declaraciones cruzadas o con mentiras para ensuciar la imagen de la otra persona.
Te podría interesar
Ahora, el conflicto fue más allá de ellos dos y alcanzó a toda su familia. Es que los hijos e hijas de la socialité y de Mario Vargas Llosa salieron a defender a sus padres de las acusaciones contrarias. Una relación entre hermanastros que nunca fue la mejor y que ahora está por los suelos debido a que cada uno defiende a su progenitor.
Desde el lado de Isabel Preysler han guardado silencio y han sido muy respetuosos con el escritor. Solo se limitaron a contener a su madre y ayudarla en este complicado momento. Las únicas que se pronunciaron tácitamente fueron Tamara Falcó y Ana Boyer. La primera borró de su feed de Instagram las fotos que tenía con Mario Vargas Llosa y la segunda se puso contenta porque la relación de su madre con el peruano nunca le sentó bien, ya que cuando estos comenzaron a salir, ella no había superado la muerte de su padre.
Desde el lado de Mario Vargas Llosa fueron más explícitos y en los primeros días de la separación cuando vieron que a su padre lo estaban dejando mal parado, al tratarlo de manipulador y tóxico, comenzaron a divulgar información falsa sobre Isabel Preysler. Hace pocos días su nieta se negó a dar declaraciones sobre la viuda de Boyer diciendo: "No voy a hablar de esa mujer".
Cada uno defiende a su progenitor
La definición de la pelea
Después de tantas idas y vueltas, la expareja sigue con su vida y han sido muy evasivos con su separación, ya que ninguna de las dos partes se sentó en los platós a hablar mal del otro, ni dieron declaraciones polémicas. Por ahora la ruptura es tranquila, pero veremos cómo evoluciona con el paso del tiempo.