Por estas horas, un caso policial ha conmovido a España pues tiene varios ingredientes que lo hacen un tema difícil de evadir. Una persona famosa, en este caso el futbolista Dani Alves, es acusada de un por ahora supuesto delito de vi*lación de una joven. El hecho sucede en una discoteca y las pruebas parecen no dejar lugar a dudas.
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Obviamente, la prensa del país se ha mojado en el caso del futbolista y, a diferencia de otros casos similares, muchos comunicadores han tenido una actitud bastante cautelosa con respecto a la víctima. Hasta a Jorge Javier Vázquez le ha llamado la atención y ha destacado la evolución que se ha visto al respecto y cómo igualmente se pueden cometer errores.
Por eso, a propósito de una discusión con Pipi Estrada por si la esposa de Dani Alves es o no también una víctima de esta situación, el presentador ha señalado “cuando tratamos este tipo de casos estoy convencidísimo que, por la educación adquirida, por recurrir a frases hechas, cometemos muchos errores. Me molesta que pienses que lo hacemos a mala fe, estamos aprendiendo como está aprendiendo el resto de la sociedad. Estamos enfrentándonos a hechos y situaciones que antes tratábamos de otra manera".
Jorge Javier Vázquez también destacó la difícil situación en la que siempre se encontraron las mujeres en casos como el que involucra a Dani Alves. “Me parece muy valiente enfrentarse a alguien que tiene mucho poder, estoy en el convencimiento de que en este tipo de ámbitos ha habido muchas mujeres que no han denunciado porque daban por sentado que no iba a ir a ninguna parte, que no la iban a creer”.
Cómo sigue judicialmente la situación del futbolista
Mientras en el caso Dani Alves ha contratado para su defensa a uno de los abogados penalistas más famosos del país, Cristóbal Martorell, Jorge Javier Vázquez ha zanjado su comentario diciendo que cuando alguien se cree impune pueden suceder cosas tremendas.
Cuando alguien se cree impune pueden suceder cosas tremendas.
Al parecer, la situación de Dani Alves estaría bastante complicada pues no solo las pruebas parecen imposibles de rebatir sino que el futbolista se contradijo varias veces en su declaración. Además, se ha sabido que fue un empleado de la discoteca quien inició el protocolo que está previsto para casos como éste al ver el estado en el que se encontraba la joven.