Como sabemos, el 2022 fue un año en el que muchas parejas famosas decidieron romper sus vínculos. Por eso, no podía terminar sin traernos la sorpresa de la separación entre Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa.
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La socialité y el escritor sudamericano tenían una relación de más de siete años juntos. Aunque muchos desconfiaron en su momento, lo cierto es que habían logrado mantener un lazo muy fuerte.
Sin embargo, todo lo que empieza tiene un final y así sucedió con la relación de Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa. Durante todo el año hubo rumores de distanciamiento, pero siempre terminaban arreglándose.
Igualmente, parece que la crisis que sufrieron durante el mes de diciembre no tuvo vuelta atrás. Por eso, hace una semana Isabel sacó un comunicado en donde confirmó la ruptura de su amor con el novelista.
Desde que terminaron, muchos han sido los rumores que hablan sobre el motivo de la ruptura. Los más cercanos a Isabel Preysler aseguran que los celos del literario ya eran inaguantables.
Estas especulaciones no han caído para nada bien en el entorno de Mario Vargas Llosa. Desde el lado del peruano, explican que la historia terminó por temas económicos, ya que supuestamente Isabel Preysler le había pedido mucho dinero para mantener la casa en Puerta de Hierro.
Obviamente, esto ha enfurecido tanto a Isabel Preysler como a sus hijos. No pueden creer que desde el entorno del Nobel de Literatura quieran hacerle creer esto a todos cuando no es lo que pasó.
Además, aseguran que Mario Vargas Llosa no aportaba nada y que prácticamente era mantenido por Isabel Preysler. Ante esto, aseguraron que si siguen intentando viralizar mentiras irán por la vía judicial.
Aseguran que Vargas Llosa no aportaba nada
Las pruebas de que Mario Vargas Llosa era celoso
En medio de todos los dichos, es Kiko Matamoros quien ha recibido información de buena fuente que reveló la verdadera personalidad de Mario Vargas Llosa: “Me han contado de varias ocasiones en donde le ha montado escenas de celos sin sentido”.
Además, el colaborador agregó: “Principios de este verano, Portugal, se celebra una boda, asiste Isabel Preysler, Mario se queda en Madrid. Se publican las fotos de la boda y ve quién está sentado al lado de Isabel en la mesa y se enoja. Ahí empezó a romperse la relación”.