Tras su regreso al trabajo en el programa de Telecinco Fiesta, después de estar varias semanas de baja médica, Marta Riesco se abrió con sus seguidores y relató cómo fue progresando su carrera profesional. Tal es así que incluso se permitió recordar a Ana Rosa Quintana.
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Mediante su cuenta oficial de Instagram, la reportera hizo un exhaustivo repaso por su carrera. "Para que veáis de dónde viene el esfuerzo de las personas y por qué nunca quieren perder lo que aman y lo que se han ganado a base de esfuerzo y trabajo", comenzó relatando Marta Riesco.
"Toda mi vida mi sueño ha sido trabajar como reportera. Cuando salí de la Universidad se me brindó una oportunidad en LaSexta. Parecía que las cosas iban a ser sencillas, pero vino el primer bache en mi vida: acabé el contrato en El Chiringuito y me fui al paro”, continuó la periodista.
Toda mi vida mi sueño ha sido trabajar como reportera
La pareja de Antonio David Flores manifestó que durante todo ese tiempo le tocó pasar por grandes procesos personales y familiares. Desde el fallecimiento de su abuela que era el ser que más quería, hasta la pérdida del trabajo de su madre que la llevó a enfrentar una depresión, de la que pudo salir con una "serie de pautas", entre las que se encontraba la medicación.
Fue entonces cuando Marta Riesco empezó a pensar en recuperar su vida profesional con la ayuda de Jano Mecha. La joven cuenta que le escribió mediante LinkedIn y que, en una primera instancia, él le explicó que de momento no había ninguna búsqueda activa, pero que se comunicaría con ella si eso cambiaba. Afortunadamente, no la estaba engañando.
Su origen en la prensa de corazón
Cuando la influencer ya lo daba todo por perdido, seis meses después de aquel primer contacto con Jano Mecha, recibió un mensaje. "Están buscando a alguien en corazón para este verano. ¿Quieres que envíe tu CV? Yo, que jamás había hecho corazón, le dije: Claro, me encantaría que lo enviaras", recordó Marta Riesco.
Si bien Marta Riesco no había trabajado antes haciendo noticias del corazón, no lo dudó ni un momento. Sabía que esa era la posibilidad que necesitaba para salir del pozo y la tomó.
Enseguida tuvieron lugar las primeras entrevistas y la competencia con otras reporteras más experimentadas, pero ella siempre le dejó en claro al equipo de Ana Rosa Quintana que no encontrarían a nadie que encarara el trabajo con más ganas que ella.