Cualquier persona dedicada a su pasión encuentra en su arte una manera de expresarse. Músicos, en su melodías y escritores, como el caso de Gabriel García Márquez y Mario Vargas Llosa, que con sus letras logran obras que son un éxito rotundo para quienes comparten los sentimientos con ellos.
Te podría interesar
El nacido en Perú, que está en proceso de recuperarse sentimentalmente por su ruptura de Isabel Preysler, había manifestado en su último escrito todo lo que vivió al lado de la exesposa de Julio Iglesias, a la que dejó muy mal parada y casi sepultada de críticas y confesiones que no hubieran salido a la luz sin una pelea de por medio.
Lo que más molestaba al entorno de Isabel Preysler era que más allá de criticar la relación, Mario Vargas Llosa habría dejado mal parada a Tamara Falcó. Luego, la futura esposa de Íñigo Onieva le puso los puntos en las íes, justamente a uno de las mejores plumas del mundo.
El drama que le ha tocado vivir a Mario Vargas Llosa
Recientemente, Jaime Bayly, otro compatriota de Mario Vargas Llosa, se ha involucrado con uno de los interrogantes más grandes de la literatura: lo que pasó el 12 de febrero de 1976 para que el propio Vargas Llosa le diera un puñetazo al ya fallecido y recordado Gabriel García Márquez.
Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez son palabras que están escritas en dorado en la historia de la literatura mundial. Ambos siendo parte de la mesa chica del movimiento literario del 'Boom latinoamericano', que se desprendió del realismo mágico que tan popular hizo al autor de Cien Años de Soledad.
Mario Vargas Llosa y Gabriel García Márquez llevaban por lo menos diez años de amistad (y una obra realizada en conjunto) y, según las versiones, algo sucedió entre el colombiano y Patricia Llosa, madre de los hijos del autor de García Márquez: historia de un deicidio, que ya tenía los pelos de punta del poco respeto que este le mostraba.
En uno de esos días, Mario Vargas Llosa no pudo contener la ira y este affaire entre quien era su amigo y su esposa, hizo que el peruano le propinara un puñetazo en la cara a Gabriel García Márquez, que, de hecho, fue fotografiado con un ojo morado saliendo del lugar que compartieron.
La verdadera historia
Patricia Llosa estaba destruida luego de que Mario Vargas Llosa la dejara por haberse enredado con Susana Diez Canseco. Ella decidió pasar unos días en Barcelona y tenía que tomarse un avión, entonces, Gabriel García Márquez se ofreció a acercarla. Sin embargo, algo ocurrió y terminaron en el Hotel El Castell de Sant Boi de Llobregat.
Lo cierto es que Gabriel García Márquez prefirió dejarla dormida en el hotel sin que nada pasara, pero ella, sin pensar en las consecuencias, le confesó a Mario Vargas Llosa una mentira y hasta agregó que "era un amante exquisito", lo que desató la verdadera furia y el fin de su amistad con Gabo.