Sin dudas, Lucía Rivera no tuvo una vida fácil, saltó a la fama por ser "hija de" y desde los 18 años la prensa se ha esforzado en convertirla en un personaje al que ella misma dice no reconocer. Por eso, decidió contar en primera persona su historia.
La modelo presentó su libro Nada es lo que parece, el cual asegura que no se trata de una autobiografía, sino que de un conjunto de sus vivencias contadas desde una visión que espera que ayude a los demás tanto como le ayudó a ella misma. Lucía Rivera trata asuntos tan delicados como la violencia machista que sufrió en sus primeras relaciones y también habla de sus padres, del adoptivo y del biológico.
Lucía Rivera visitó a Susanna Griso en su programa para hablar de su nuevo libro que ya está a la venta: "No es autobiografía, que conste, porque soy muy pequeña. Quería que la gente adolescente que tuviera este tipo de problemas lo supiera y poder ayudar de alguna manera. No creo que pueda ayudar como una psicóloga, pero si puedo ayudar lo mínimo, lo haré".
"Estoy un poco nerviosa. No quería victimizarme ni hacer un drama de todo esto, al final es la vida de alguien. Me gusta contarlo y ha sido como un descanso porque habían creado un personaje ficticio de mí, que no existía. Como que eres exitosa, triunfadora, guapa. Y quizá yo eso no lo vi nunca", manifestó la hija de Blanca Romero dejando ver que no está exenta de los problemas.
Habían creado un personaje ficticio de mí que no existía
Una entrevista cargada de información, en la que Lucía Rivera recordó el día de su nacimiento y las complicaciones durante el parto: "Ella no quería cesárea, pero al final se la tuvieron que hacer y me rompieron los dos fémur al nacer". Sin embargo, no ha sido el único problema de salud al que se ha enfrentado.
Los malos tratos de sus exparejas le afectaron a Lucía Rivera el hipotiroidismo congénito que sufre: "La violencia machista está super blanqueada en la adolescencia. Lo normalizas. Cuando conoces a tu primer amor no piensas que haya otra manera de amar. Mi madre no estaba enterada de nada. Es de lo primero que se encargan, de aislarte y hacerte sentir culpable".
La violencia machista está super blanqueada en la adolescencia
"Fui a un endocrino y me dijo no sé cómo puedes estar andando, cómo puedes estar literalmente viva, porque yo tenía 92 de tiroides y el máximo es 6. Entonces dije: Tengo que salir de aquí. Mi madre fue la primera que me dijo: A Madrid", añadió la influencer.
Su padre biológico
La identidad del padre de Lucía Rivera siempre fue una gran intriga. Si bien en su libro la joven relató: "Mi padre no había venido a conocerme. El villano había venido a extorsionar a mi madre y a pedirle dinero a cambio de unos vídeos de cuando era una niña y mantenían relaciones". Ahora quiso aprovechar la entrevista con Susanna Griso para profundizar.
Mi padre no había venido a conocerme, venia a extorsionar a mi madre
"Yo tenía diez años, me enteré con el tiempo. Obviamente cuando una niña es adoptada tiene intriga por la genética, sobre todo cuando vas al médico. Fue un encuentro desafortunado. Yo lo había puesto como un superhéroe. Creo que a toda la gente adoptada le pasa más o menos lo mismo. Cuando lo conocí fue todo bien hasta que por detrás lo hizo", afirmó.
Pero para sorpresa de ella, el tiempo le dio un esposo a su madre que terminaría por adoptarla. Lucía Rivera, en el libro, se refiere a Cayetano Rivera por su inicial: "Todo genera polémica. No sé qué tengo. Prefiero sobre todo protegerlo a él, no quiero que esté mezclado si no quiere. No lo hablé con él. A mi manera, psicológicamente, era como protegido".