En los últimos tiempos, la Familia Real del principado no ha tenido muchas apariciones públicas. Sin embargo, ni el Príncipe Alberto, ni la Princesa Charlene se iban a perder del Gran Premio de Fórmula 1.
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Durante el 2022, este evento ya había llamado la atención del matrimonio. En esa ocasión, la exnadadora se volvió a mostrar en público luego de estar un tiempo fuera del centro de la escena por un problema de salud.
Esta vez, el Príncipe Alberto y la Princesa Charlene han sido los encargados de entregar los trofeos a los pilotos ganadores del Gran Premio de Fórmula 1 en el podio, entre ellos, el destacado Fernando Alonso.
Más allá de que la presencia más que la sudafricana llamó la atención, otros rostros conocidos de la familia tampoco han faltado a la cita, como Carlota Casiraghi, su hermana Alexandra de Hannover y Pierre y Andrea Casiraghi.
El Gran Premio de Fórmula 1 de Mónaco se convirtió con el paso del tiempo en una inesperada pasarela de glamour, donde tanto la esposa del Príncipe como las hijas de Carolina de Hannover y las nueras han deslumbrado con su estilo.
La Princesa consorte ha sido la que ha generado más interés en este duelo de estilos. No sólo por su llamativo conjunto firmado por Akris, sino también por su nuevo cambio de peinado. La Princesa Charlene ha oscurecido su cabello, dejando atrás su tradicional rubio.
En este contexto, se dio una situación que podría haber generado incomodidad a la Princesa Charlene. Esto se debe a que Jazmín Grace Grimaldi, hija del príncipe Alberto, tampoco quiso perderse el evento y optó por un atuendo muy similar al suyo.
La hija del príncipe Alberto optó por un vestido similar al de Charlene
Aunque no se le vio en ningún momento junto a su padre o a la Princesa Charlene, eligió un modelo que recordaba al de la royal, aunque aún se desconoce la firma. Ambas se han convertido en protagonistas de la noche debido a un inesperado y, tal vez, incómodo duelo de estilo.
Se reveló el motivo por el cual Charlene no deja a Alberto
A esta altura, hay una pregunta flotando en el aire, ¿si no está cómoda o no está bien junto a su marido, por qué la Princesa Charlene no se separa? En este sentido, tanto la Familia Real monegasca, como todas las demás familias reinantes, tienen reglas muy claras sobre estas cuestiones: los herederos o herederas al trono deben criarse dentro de la monarquía.
Es así como, si la Princesa Charlene se divorciase, de inmediato perdería la custodia de sus hijos, los gemelos Jacques y Gabrielle, que actualmente tienen ocho años. Por eso, hay quienes señalan que la exdeportista esperaría a que sus hijos sean mayores de edad para poder tomar la decisión de poner fin a su matrimonio con el Príncipe Alberto.