Hace poco, los medios de comunicación quedaron atónitos cuando la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, durante uno de los partidos de balonmano de Pablo Urdangarin. Este encuentro será recordado en la historia, ya que marcó la primera vez que el exmatrimonio se saludó con un beso en público desde su separación.
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Sin embargo, lo que realmente capturó la atención de todos fue la presencia de Miguel Urdangarin. El tercer hijo de la Infanta Cristina se robó el protagonismo que antes pertenecía a su hermano. Durante el escándalo mediático, Pablo Urdangarin había sido el único hijo en España y actuó como vocero de sus padres, manteniendo un perfil público más alto que el resto de la familia.
El regreso de Miguel Urdangarin al país después de graduarse en Ciencias del Mar en el Reino Unido sorprendió a todos debido a su impresionante transformación física. Durante el partido de su hermano, se notó claramente su crecimiento en estatura, incluso alcanzando la altura de Iñaki Urdangarin, que ronda los dos metros.
Miguel Urdangarin se llevó la mirada de todos los presentes.
Además, el hermano de Irene Urdangarin lucía un cabello más largo de lo habitual y mostraba un afecto evidente hacia sus padres, abrazándolos y besándolos constantemente. Aunque siempre había mantenido un perfil bajo y evitado la atención mediática, su repentina aparición ha puesto en tela de juicio la relación entre los hermanos.
Cambio de roles
Ahora, tanto Pablo Urdangarin como Miguel Urdangarin compiten en el centro de atención debido a su carisma y presencia en la Familia Real. Si bien reina la incertidumbre, lo único seguro es que la dinámica entre los hermanos ha cambiado y Pablo Urdangarin ha quedado en segundo plano.