Lucía Rivera es una auténtica estrella. La modelo de 24 años, a quien hemos visto crecer a través de los medios de comunicación, contó por primera vez su historia en su primer libro, Nada es lo que parece, en el que trata cuestiones que no dejan indiferente a nadie. Sin embargo, en las últimas semanas, lo más sonado en torno a su vida fue la nueva ilusión de Cayetano Rivera.
Lucía Rivera reapareció este jueves en la presentación de RABAT Salvaje, la nueva colección de RABAT, diferente y arriesgada, en la que se pone en valor el diseño que caracteriza a la firma. Decidida y dispuesta a hablar de todos los temas de actualidad, la hija de Blanca Romero se mojó sobre la nueva relación de su padre.
El torero le ha vuelto a dar una oportunidad al amor de la mano de María Cerqueira, una conocida presentadora portuguesa y Lucía Rivera no puede estar más contenta de que él vuelva a sonreír. Felicidad que no encuentra cuando le nombran a Eva González por lo que les ha pedido a los medios de comunicación allí presentes que por favor le dejen de preguntar por ella.
"Es un tema súper pasado de moda, la actualidad tiene que ir variando. Le deseo el bien a todo el mundo", señaló la influencer. Aunque Lucía Rivera no quiso entrar en detalles de si conoció ya a María Cerqueira, lo cierto es que se siguen en las redes sociales, se intercambian likes y, por supuesto, se comentan las fotografías.
"Yo deseo la felicidad a todo el mundo, no sólo a mi padre", afirmó. Lucía Rivera tampoco hizo referencia de sus exparejas, de hecho, dejó en claro que "no quiero que se me pregunte por ningún hombre, valgo mucho como mujer", haciendo alusión a la canción de Shakira con la frase "las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan".
"Soy una mujer completamente distinta"
Lucía Rivera lo único que tiene claro es que no cierra la puerta al amor, pero está plenamente centrada en sí misma: "Creo que ya lo importante no es ni que sea guapo, con que sea bueno me vale. No me suelo enamorar fácil. Me encanta estar sola, conmigo. Cuando aprendes a estar sola de verdad y estás feliz, es muy difícil encontrar a alguien".
"Soy una mujer completamente distinta antes y después del libro, sobre todo porque la lucha interna ya dejó de ser interna, ya se sabe quién soy de verdad, con lo cual ya puedo empezar de cero de verdad", sentenció.