Las tareas de limpieza del hogar pueden parecer sencillas a simple vista, pero los problemas aparecen cuando se hace foco en los detalles. Allí es cuando estos quehaceres se convierten en un desafío sumamente complicado y difícil de resolver. Un claro ejemplo de esto es el sarro que se forma al lado de las canillas de los baños y la cocina.
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Al parecer, este trabajo es una preocupación para una gran parte de la población mundial por lo que los principales medios de comunicación ya han hecho énfasis en ello. De hecho, esta temática del sarro en las canillas ocupó una sección completa del programa británico Sort your life out (Ordena tu vida), que se emite por BBC One.
Allí apareció un gurú de limpieza llamado Iwan Carrington que compartió un truco casero que promete dejar toda la grifería como nueva libre de sarro. Lo novedoso de esta técnica reside en que, para ponerla en práctica, no es necesario adquirir los típicos productos de limpieza, sino que lo más importante es contar con cuatro ingredientes básicos que cualquier persona puede tener en su hogar.
Lo más importante es contar con cuatro ingredientes básicos que cualquier persona puede tener en su hogar
En primera instancia, se debe sumergir un paño limpio en vinagre blanco y colocarlo sobre las zonas donde se encuentra todo el sarro, que suele estar en la base de las canillas. El vinagre es conocido por su efectiva capacidad para disolver sustancias complejas debido a sus fuertes propiedades ácidas.
Los pasos a seguir para sacar el sarro de las canillas
Mientras el vinagre hace su trabajo, se debe preparar una pasta para lograr un resultado perfecto. Esta mezcla está compuesta por sal, jugo de limón y bicarbonato de sodio. La combinación de estos tres ingredientes es clave para obtener una limpieza ideal del sarro: la sal actuará como un abrasivo suave, el bicarbonato eliminará manchas y olores desagradables, en tanto que el jugo de limón proporcionará una acción desinfectante.
Una vez que la pasta esté elaborada, se debe retirar el paño con vinagre blanco y se procederá a aplicar la mezcla con un cepillo pequeño, que debe llegar con facilidad a todas las zonas afectadas por el sarro. Por último, las canillas deben ser aclaradas con agua tibia para alcanzar un brillo perfecto.